segunda-feira, 18 de abril de 2016

Hoy no circula extremo

Con las contingencias en la Ciudad de México, aparece la medida tradicional: una imposición de un Hoy No Circula más estricto. Y estas producen la reacción típica: miles de críticos, estudiosos, editorialistas de opinión y bloggeros de hobby quejandose y señalando lo inútil de la medida y sus muchas facetas antidemocráticas. También una segunda ola de microbloggers ciclistas aparece ahora, repitiendo "yo circulo diario". Como aclaración de postura, me cuento entre estos últimos.

La gran mayoría de las críticas razonadas al programa son asertadas: efectivamente el esquema promueve la compra de vehículos privados, aumentando el número funcional de coches circulantes de la Ciudad. También es cierto que no toma en cuenta toda la industria pesada y media pesada que sigue asentada en el Valle del Anahuac. Y no hace referencia a todos los árboles que se han talado recientemente para ampliar vialidades. La medida es, ciertamente, antidemocrática y mentirosa. 

Sin embargo, el grito acumulado de críticas tiene un sonido promedio que revela también una postura bastante falsa. Es claro que muchos de estos críticos están molestos por la razón individualista de que no pueden circular en SU coche, al que defienden atacando el transporte público como fuente de mayor contaminación. Ese razonamiento confunde la causa real de la contaminación (la saturación de vehículos e industria en el valle), con la proporción de responsabilidad adjudicable a un grupo particular. En un fenómeno colectivo masivo como este, no hay un sólo grupo responsable. Como dicen por ahí: el tráfico somos todos.

A pesar de las críticas, los dias en que la aplicación del programa fue más estricta bajo el tráfico y los tiempos de traslado, y el aire si resultó más respirable. Los tiempos de traslado en la Ciudad de México son los peores del mundo, comparando ciudades de poblaciones similares. Tener tantos motores prendidos durante tantas horas, parados en el tráfico es el problema en si. Disminuir el número de vehículos circulantes drasticamente ataca el problema por dos lados diferentes: menos motores rugiendo y menos tiempo de uso de aquellos que si están circulando.  Así que al menos el programa esta funcionando en lo inmediato. Pero el impulso que se da a comprar más vehículos por familia o individuo acaba con este logro. 

La cultura del individualismo y los valores tergiversados del capitalismo extremo obligan al chilango promedio a buscar tener su propio coche y a usarlo individualmente todos los días, solucionando (en apariencia muy equivocada) el problema para si mismo, y al diablo con el resto del mundo, ¿un coche más aumenta demasiado el problema, acaso? Y la misma cultura hace pervasiva la sensación de que el tráfico son "los demás", que uno SI necesita usar el coche para ir al trabajo, etc. Que sólo los "nacos/jodidos/nezas" tienen que usar el tansporte público, y los pobres o chavos banda son los que se desplazan en bicicleta, etc. Los peseros/metro y demás son un desastre absoluto a causa de la corrupción de quienes los controlan y las autoridades, y no hay un público agresivo interesado en mejorarlos o posibilidades reales de que entren nuevas formas de transporte colectivo privado. 

La contaminación en la Ciudad de México es un ejemplo concreto de como el individualismo capitalista destruye la calidad de vida para todos. Mi crítica al programa Hoy No Circula es que es demasiado blando (y deshonesto, cuando se construyen todo el tiempo segundos pisos de cuota en la Ciudad). El promedio de pasajeros por coche está entre 1.2 y 1.7, es decir, significativamente y consistemente abajo de 2: los coches van vacíos excepto por sus choferes. Como no hay un transporte colectivo descente o medianamente suficiente, pero si hay una cantidad absurda de automóviles privados, propongo el siguiente No Circula: no circulas si vas sólo en tu coche, sin excepción, incluyendo vehículos oficiales y transportistas comerciales. Punto. Coches de cuatro plazas vacíos no circulan. Tal vez después de las 22:00 y antes de las 6:00.  Las vialidades elevadas de cuota también son ejemplo de deshonestidad individualista: que los que quieran salir del tráfico paguen por su privilegio, su estatus v.i.p. Podemos convertir esa obra idiota en una suerte de premio al antiindividualismo. Que esas vialidades sean exclusivas para carros con 3 ocupantes o más, gratuitas por supuesto. Dado que los chilangos no estamos suficientemente educados para considerar a los demás, sugiero medidas que hagan altamente incómodo tener actitudes de uso individualista del coche y que fomenten actitudes de corte más social.

Dicen por ahí también que un país rico es aquel donde los millonarios usan el transporte público. La inversión que se usa en la Ciudad en transporte es pésima: la gran mayoría (80%) se usa para vialidades que fomentan el uso del automóvil privado. Si se descongestionan las vialidades con medidas como las que sugiero u otras más inteligentes, se puede aumentar el transporte colectivo. Obviamente ahí toca enfrentarse contra grupos corruptísimos que son potencialmente letales. Un tema peligroso que hay que pensar con más cuidado. Una inversión sin corrupción podría crear sistemas de peseros con horarios regulares y vías despejadas. Mientras tanto, claro, insistiré: todo aquel que esté en condiciones de usar la bicicleta debe usarla y mantenerse fuera del sistema vehículo de motor - corrupción - ecocidio. Hay que romper paradigmas socioculturales: llegar sudado al trabajo debe considerarse algo de orgullo y no de pena. Andar 10km es poco.  Te puedes poner la camisa llegando a la oficina, en el baño, por favor.

Monta o muere ("ride or die"), deciamos cuando comezó el movimiento agresivo de bicimensajeros y carreras de bici urbana. Aquí y ahora la afirmación resulta fuertemente pertinente: nos estamos matando todos usando esos coches estorbosos y pesados de motor, le estamos regalando 3 o 4 horas de nuestra tiempo libre (el trabajo fantasma) a las operaciones de insensitivación. Más horas en el tráfico son menos horas para autoeducarse, tener hobbies, deporte, esparcimiento, lucha social, etc. Dudo que esto lo hayan planeado los imbéciles de arriba, pero de que les beneficia, les beneficia. Decide tú, pues, si quieres trabajar 3 horas diarias gratis para ellos. 

Ah, y si me van a señalar las faltas de ortografía, diviertanse. Hay un chinguero por ahí.